Todos los días,
vuelve a su hogar con una nueva cara bonita. Así las colecciona él, y las apila
junto a hermosas frases poéticas que arma para cada rostro.
Se enamora una
vez más. Se vuelve a encontrar, para tiempo después: volverse a perder.
Los años lo
acompañan, le ofrecen una vida, un amor. Pero él no…a él no le interesa.
Así pasó su vida,
coleccionando figuritas.
Y si alguna se
perdió, es una anécdota para él.
Hay demasiados
álbumes para llenar.